Bien, esta es quizá de las primeras preguntas que nos surgen en el momento que ya hemos decidido e interiorizado la necesidad o quizá con un poco de suerte, las ganas de iniciarse en la realización de cualquier tipo de actividad física.
Antes que nada, quisiera dar unas definiciones:
Actividad física: cualquier movimiento corporal producido
por los músculos esqueléticos que provocan un gasto energético.
Ejercicio: movimiento corporal planeado, estructurado, y
repetitivo, realizado para mejorar o mantener uno o más componentes de la
aptitud física.
Aptitud física: una serie de atributos que las personas
tienen o adquieren, que se relacionan con la capacidad para realizar una
actividad física.
Quizá algunos crean que cuanto más se entrene mejor, pero no es así. Dependerá de la actividad y/o ejercicio que queramos realizar y del objetivo que pretendamos alcanzar con ello. Si se trata de realizar caminatas diarias sin más, podemos (y deberíamos) realizarlas cada día con un mínimo de 30 minutos a paso ligerito, no nos vale salir a caminar e ir con un paso de procesión de semana santa! Hay que llevar un paso ligero que veamos que nos cuesta cierto esfuerzo (sin pasarse) el rato que estemos caminando. Si nos referimos a realizar ejercicios en un gimnasio, es recomendable acudir entre 3 y 5 veces por semana. Si vamos menos de 3 veces, no notaremos apenas efectos y no nos aportará gran cosa a nuestro cuerpo y si vamos más, podemos caer en el sobreentrenamiento y eso no es nada bueno para nuestra salud. El tema de la musculación/culturismo se me escapa un poco de las manos, en general siempre que os hable de ejercicios me referiré a un entrenamiento standard de mantenimiento y tonificación, sobretodo desde mi propia experiencia como mujer con el objetivo de fortalecer musculatura y augmentar capacidad aeróbica.
Desde mi propia experiencia, he tenido épocas en que por motivos de trabajo o bien personales, no he podido ir más de 2 o 3 veces por semana y puedo confirmar que no veía evolución ni progreso...ahora llevo una temporada yendo 5 veces por semana y me siento mucho mejor, además de progresar tanto en resistencia entrabajos cardiovasculares como en fuerza en ejercicios con pesas. Igualmente, si os decidís por apuntaros a un gimnasio, el personal que hay suele tener una buena preparación y puede orientaros sobre la frecuencia y ejercicios más adecuados para cada uno de vosotros.
Al principio puede ser un poco costoso iniciarse en cualquier rutina, si se puede conseguir un compañero/a para compartir ese ratito de desconexión siempre se hace más ameno, aunque debemos tener la suficiente voluntad y ganas de seguir moviéndonos por nosotros mismos, es decir, si un día la otra persona no puede acompañarte, salir tú sólo o ir al gimnasio solo...apoyarse va bien, pero no hay que echarle la culpa al otro si no consigues ir al gimnasio! Sólo depende de tí mismo, de tu decisión de ir o no ir, eres tú quién decide.
Si consigues ir asíduamente y no flaquear durante 60 días, esa "obligación" inicial pasará a convertirse en una rutina y será parte de tus quehaceres diarios. A mí me ha pasado y ahora si estoy una semana sin ir, siento que me falta algo y al volver a enganchar, aunque salga que no pueda más de agujetas...me siento realizada, de haber podido con ello y con ganas de comerme el mundo!
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